El cerumen es crucial para mantener nuestros oídos saludables. Es una mezcla de secreciones oleosas, células muertas de la piel y polvo, que sirve para proteger los oídos de la suciedad, las bacterias y las infecciones.
A pesar de su importancia, muchas personas sienten la necesidad de limpiar los oídos insertando objetos como bastoncillos de algodón, lo cual no es necesario y puede eliminar los aceites naturales del oído, causando más irritación e incomodidad. Peor aún, algunas personas utilizan otros objetos inadecuados, como tapones de bolígrafos u horquillas, que pueden dañar le conducto auditivo.
En este contexto, las velas para los oídos se presentan como una opción que algunas personas consideran mejor para eliminar el cerumen, ya que no requiere introducir objetos profundamente en el oído. No obstante, hay poca evidencia científica que respalde la eficacia de estas velas. Al contrario, se ha observado que pueden generar más problemas que soluciones, como la posibilidad de que la cera de la vela entre en el oído en lugar de extraer el cerumen.
¿Son eficaces?
En cuanto a si las velas para los oídos realmente funcionan, es importante señalar que, aunque algunos remedios naturales o homeopáticos pueden ser útiles, como el uso de aceite de oliva para suavizar el cerumen endurecido, las velas para los oídos no cuentan con el apoyo de la comunidad médica. Hay muchas imágenes que muestran restos de cera en el interior de las velas para los oídos, pero las investigaciones han demostrado que esta cera proviene de la vela y no del cerumen del oído.
Además, los estudios han intentado replicar la supuesta succión que las velas para los oídos dicen generar, pero no han encontrado pruebas de que realmente se produzca esta succión ni de que el cerumen se elimine efectivamente.
En conclusión, las velas para los oídos pueden ser peligrosas, causar daños a los oídos y la cara. Incluso sin restricciones específicas en algunos países, su uso es desaconsejado por profesionales de la salud. Para limpiar los oídos de manera segura, es mejor evitar introducir cualquier objeto en ellos, a menos que sea bajo la supervisión de un especialista en salud auditiva.
